Nunkui y la creadora de plantas

Nunkui y la creadora de plantas

Muchos años antes de que existiera la selva, los shuares vivían en una llanura cubierta por unas pocas de hierbas. Una de ellas el unkuch era su único alimento. Con él soportaban el calor ecuatorial. Pero un día, la hierba desapareció y los shuares empezaron a pasar hambre. Buscaron en vano por los alrededores, hasta que una mujer decidió arriesgar su vida en un viaje se llamaba Nuse. Animando a sus hijos a seguirla, Nuse salio  a buscar el unkuch  por los lugares mas escondidos, caminaron varios días siguiendo el curso del río, pero el cansancio hizo que, uno a uno, cayeran exhautos sobre la arena. De repente, Nuse vio bcomo caían trozos de un alimento desconocido, se abalanzó hacia el agua y los cogió. Probó este dulce alimento y noto como recuperaba fuerzas. Entonces, le apareció una mujer de rostro dulce. Nuse , asustada le preguntó: 
-¿Quién sois?
-Me llamo Nunkui- dijo la misteriosa mujer- y soy la creadora de las plantas. Sé que tu pueblo vive en una tierra seca donde ya no crece el unkuch.
-¡Sí señora mi gente morirá!
- Nada les sucederá, Nuse. Has demostrado tu valentía y por eso te daré no solo el unkuch, sini toda clase de alimentos, como la yuca que acabas de comer. En unos segundos, ante la mirada atónita de Nuse, aparecíeron campos y huertos llenos de color. Nuse nunca había visto un paisaje tan verde y majestuosa: era una selva . Nunkui continuó:
-Tu pueblo sobrevivirá gracias a ti. Vuelve con ellos y sé feliz.
-¡Gracias Nunkui, muchas gracias!
Nunkui desapareció y Nuse aún maravillada, reanimó a sus hijos con yuca, plátano y otros alimentos deliciosos, y volvió con ellos al territorio de los shuares por el bosque espeso que tenía ante si.
Al llegar, vieron como las plantas crecían también allí de forma generosa, convirtiendo aquel desierto en una tierra de esperanza.